Estas gritas en la tierra cuentan con aguas cristalinas rodeadas de imponentes paredes de roca. Es como una piscina natural escondida en la Isla Santa Cruz, perfecta para una aventura rápida lejos de las multitudes (siempre y cuando vayas temprano, encontrarás multitudes a partir de las 12 del día).
Simplemente debes tomar un corto paseo en bote, un paseo panorámico por una playa y una mina de sal, y te encontrarás sumergiéndose en esta maravilla geológica única.
¡No olvides tu cámara impermeable y zapatos resistentes para el terreno rocoso!